Una primera aproximación en el camino hacia el civismo tecnológico, a través de la formulación de un esquema que sirva de contrapeso y mediador en la configuración de un futuro tecnológico más justo, democrático y seguro.
Los procesos en ciencia, tecnología e innovación (CTI) deben contribuir a la constitución de una sociedad mejor y más libre, ayudando a la humanidad a resolver los desafíos globales compartidos del siglo XXI, con especial énfasis en la resolución de la crisis climática, el desarrollo de las transformaciones digitales e, incluso, el avance en la conquista espacial.
Es deber de la sociedad venezolana configurar un desarrollo tecnológico más inclusivo, sostenible y centrado en el ser humano.
Se requiere una sociedad civil informada, sensibilizada y consciente sobre el potencial de las nuevas tecnologías y los posibles riesgos que pueden llegar a detonar, a la vez que sea capaz de comprender e insertarse en la resolución de los grandes problemas globales y avanzar para reducir la brecha tecnológica.
David Eduardo Oviedo Mavarez
Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, Barquisimeto, estado Lara